Jémpe y Yákakau: una lección de lo verdadero y lo aparente

Recibido: 01/14/2023.             Aceptado: 30/06/2024.

DOI: https://doi.org/10.55996/manguare.v3i2.244

 

Manuel Yoplac Acosta

Universidad Nacional Toribio Rodríguez de Mendoza.

https://orcid.org/0000-0003-1980-2997

manuel.yoplac@untrm.edu.pe

Basado en: “Los Shuár Yákakua y Jémpe”. Narrado por Andrés Tello. Caterpiza (Río Santiago - 1081). Fuente: Manuel García-Rendueles (1996). Yaunchuk… Universo místico de los huambisas. Tomo II. Páginas 717-724.

Dibujos: Gerardo Petsaín Sharup

 

Resumen

En la concepción ancestral del mundo awajún y wampis los animales eran humanos. El presente trabajo recoge el resumen de un mito de estas dos culturas de la Amazonía peruana. Jémpe, que es el ave picaflor y Yákakau que es un ave de bello cantar, trabajaban para poder vivir y dar a conocer que pueden mantener una familia con su sabiduría en la chacra. Así, Jémpe y Yákakau fueron, -de algún modo- sometidos a la prueba de quien hace mejor la chacra. Ambos se retiraron al bosque en busca del mejor terreno. En tanto Jémpe encontró un terreno fértil, empezó hacer la chacra, en cambio, Yákakau fue a la cima de un bosque donde el terreno no era muy fértil, pero había abundantes piedras. Así, mientras Jémpe hacía su chacra con entusiasmo y en silencio, Yákakau tiraba las piedras, pero hacía mucha bulla. Al final, Jémpe fue reconocido por su trabajo en cambio, Yákakau castigado por su mentira.

 

Palabras clave: representaciones; awajún; wampís, verdad, falsedad.

 

Figura 1

Jémpe y Yákakau yendo a buscar el mejor lugar para la chacra

 

 

Nota. En esta pintura hay dos personajes, uno se llama Jémpe (el que adelante el camino) y el otro se llama Yákakau. La población en aquel tiempo remoto le dijeron quién de ustedes hará buen cultivo. Ellos se fueron al bosque con sus herramientas para elegir el mejor terreno agrícola. Eligieron cada quien su terreno. Se pusieron entre ellos cerca para abrir la chacra.

 

 

 

Figura 2

Jémpe y Yákakau trabajando para hacer la chacra

 

 

Nota. Esta segunda pintura expresa cómo ambos han asegurado el terreno para su chacra. Jémpe comenzó a trabajar con mucha voluntad y esmero, en cambio, Yákakau en vez de trabajar estaba amontonando y tirando piedras desde la cima del cerro. Jémpe regresaba a la casa para tomar masato para clamar el cansancio y sed y luego volvía rápido a su trabajo de abrir la chacra.

La gente que escuchaba los sonidos en el bosque, se preguntaba: ¿por qué Jémpe regresa rápido a tomar masato, seguro que no trabaja, en cambio, pensaron que Yákakua estaría trabajando duro porque no regresaba y del lado de su chacra se escuchaba mucho ruido.

 

 

 

Figura 3

 Núwa (mujer) observando a Jémpe y Yákakau cómo hacen la chacra

 

 

Nota. Esta pintura representa, que, al ver que Jémpe venía rápido a tomar masato y Yákakau hacía mucho ruido, una mujer fue enviada y se fue a verlo a escondidas para comprobar qué era lo que estaba pasando con el trabajo. La mujer comprobó que Jémpe estaba por terminar la chacra, en cambio Yákakau estaba disimulando en trabajar y lanzaba piedras hacia abajo. Comprobó que el ruido no era por la caída de los árboles al abrir la chacra, sino por el ruido que hacían las piedras que rodaban en medio de la montaña. Luego ella regresó e informó a la gente diciendo que Jémpe estaba por terminar la chacra, en cambio que Yákakau no hacía nada, solo dedica botar piedras y mentía hacer la chacra.

 

 

 

 

Figura 4

Jémpe y Yákakau tomando masato al regreso de la jornada

 

Nota. En esta última pintura, Jémpe y Yákakau regresaron a la casa al final del día al ver que el sol se ocultaba, y, llegando a casa, al Yákakau le habían preparado un masato de sunkíp para que al tomar rasgue su cuello de tremenda comezón que le produzca y que le causara castigo. En cambio, a Jémpe lo habían preparado un rico masato de pijuayo como premio a su trabajo honesto. Por su parte Yákakau sufrió mucho por la picazón y por eso tiene en su cuello color rojo, que por tanto rascar su cuello salió sangre y se quedó ahí manchado para siempre.

 

Fin de la historia.

 

A modo de conclusión

En el mundo awajún y wampis ancestral el trabajo es valorado como una verdad y la pereza como un mal. Jémpe es compensado con buen masato en cambio Yákakau es castigado con un masato que lo hace daño. Por otro lado, la verdad se concibe como lo real y la mentira como lo aparente. La verdad es buena porque hace bien y se corresponde con la realidad, lo aparente en cambio, provoca duda, duda que puede comprobarse como un mal y que debe ser censurado.

 

 Glosario

Jémpe. Ave sabia en el mundo awajún y wampis. Picaflor.

Núwa. Mujer.

Sunkíp. Planta arácea. Planta venenosa que produce picazón.

Yákakau. Ave de cantar muy bello. Tatatao.

 

 

Referencias

Asociación Fe y Alegría del Perú. (2020). Diccionario Awajún-Castellano, Castellano-Awajún Awajún Chícham Apáchnaujai.

 

Formación de Maestros Bilingües de la Amazonía Peruana. (2011). Diccionario Awajún-Castellano.

 

García-Rendueles, M. (1996). Yaunchuk… Universo místico de los huambisas. Tomo II. CAAAP.